Los depósitos a plazo en Unidades de Valor Adquisitivo (UVA) vienen creciendo desde fines del año pasado, con una fuerte aceleración a partir de marzo, cuando alcanzaron los $ 281.635 millones. De este modo se posicionaron a precios constantes en un nivel similar al de mediados del año pasado, cuando registraron su máximo valor histórico, según difundieron las autoridades del Banco Central de la República Argentina (BCRA), mediante un comunicado.
Se trata de instrumentos ajustables por el Coeficiente de Estabilización de Referencia (CER), que equipara al Índice de Precios al Consumidor que mide el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). En el último mes -promedio móvil a 30 días-, se incrementaron un 7,8% para las colocaciones tradicionales y un 12,8% para las precancelables, con datos al martes 19 del mes en curso.
Los tradicionales se instrumentan en pesos, se convierten en UVA al momento de la colocación y, al finalizar el plazo de inmovilización, se calcula el interés devengado y se convierte el capital actualizado según el valor del UVA del momento, cuyo precio se actualiza continuamente en función del CER.
El plazo mínimo de colocación de este instrumento es de 90 días. En cambio, los depósitos a plazo en UVA con opción de cancelación anticipada tienen también un plazo de 90 días, pero el ahorrista puede hacer uso de la opción de precancelación a partir del día 30.
En caso de que se precancele (después de los 30 días) la tasa que pagan es diferente a si se mantiene hasta su vencimiento. En el primer caso, la tasa de interés nominal anual es fija en pesos y actualmente se ubica en 41% (la tasa efectiva anualizada es de 49,66%) y, en el segundo caso, y de tratarse de personas humanas, se paga una tasa de interés mínima garantizada de UVA + 1% anual.